- Vicky Luján
¿Contar calorías? Una tendencia que pasó de moda
Updated: Jan 4
Por Vicky Luján, Sugar Mindfulness Coach, IG: @vicky.lujan

¿Cuántas veces al comprar un producto volteamos el empaque para ver sus calorías?, o quizás, cuando estamos comiendo, recordamos que en el envase podemos ver la cantidad calorías que vamos a consumir. Contar calorías es como ir a un show de moda y encontrar vestidos con diseños obsoletos. Aunque ha sido la referencia nutricional más popular durante años, ¡eso ya es historia del pasado!
Hoy en día sabemos que las tablas calóricas no significan más que números que dan información general con base en la cantidad de grasas, proteínas y carbohidratos. Pero esto no es esencial. La regla de oro en nutrición (nueva y atemporal) es la densidad nutricional.
Cuando sales a comprar un vestido, quieres que los tejidos sean de alta calidad, con un corte favorecedor para tu silueta y con detalles únicos que te hagan lucir espectacular. De igual manera, tu dieta debe tener una alta densidad nutricional, lo que hará posible crear una belleza integral que se proyectará en tu cuerpo y en tu personalidad.
¿Qué es la densidad nutricional? Es conocer la cantidad y calidad de nutrientes de cada alimento que consumimos, incluyendo los macronutrientes, micronutrientes y fitonutrientes.
¿Por qué contar calorías no está de moda?

Las calorías miden la cantidad de energía que un alimento proporciona a nuestro cuerpo considerando los macronutrientes: carbohidratos, proteínas y grasas. Es decir, nuestro cuerpo necesita de estos tres tipos de macronutrientes para metabolizarlos y transformarlos en energía para sus diferentes funciones.
Ahora bien, el conteo calórico no dice si nuestro cuerpo está bien nutrido o tiene alguna deficiencia nutricional. Es como evaluar la calidad de una prenda de vestir únicamente por el peso de la pieza, sin considerar la calidad de sus tejidos o su confección.
Cuando escuchamos decir que una persona generalmente debe consumir 2,000 o 2,500 calorías al día, es simplemente un marco de referencia muy general. Realmente, la ingesta de alimentos debe estar apoyada en la densidad nutricional que nos proporcionan y en el estilo de vida de la persona, para así poder llegar a optimizar los recursos alimenticios.
Por el contrario, muchas dietas restrictivas se basan en un bajo consumo calórico, lo cual hace que el organismo genere una señal de estrés o alarma debido a que no está recibiendo todos los nutrientes para su buen funcionamiento. Más que contar calorías, estar y lucir saludables es la meta para proyectar nuestra belleza integral.
¿Alimentos buenos o alimentos malos?
Los alimentos son simplemente información para el cuerpo. Cada vez que ingerimos algo, el cuerpo decide a través de las enzimas digestivas cómo debe procesarlo y para qué puede servirle en su funcionamiento interno. Esta es la base de una dieta enfocada en densidad nutricional, y no en densidad calórica.
El mensaje que le estamos enviando al cuerpo no es el mismo si consumimos 100 calorías de azúcares procesados o 100 calorías de frutas naturales. Los azúcares procesados generarán picos de glucosa en sangre muy elevados sin valor nutricional. Las frutas, especialmente cuando se comen en su versión original, también generarán picos de glucosa en sangre, pero con fibras, minerales y fitonutrientes que sirven para realizar actividades vitales para el cuerpo y la mente.
Volviendo a la comparación con el mundo de la moda, no es lo mismo 100 yardas de un tejido sintético que 100 yardas de seda natural. El tejido sintético no tendrá la misma caída que un tejido de seda natural. No será igual al tacto con la piel, ni dará el mismo efecto sobre nuestro cuerpo. De nuestra elección dependerá el resultado final de nuestro look. Y esto también sucede con las decisiones que tomemos de los alimentos que ingerimos. Nos darán o no el “look saludable” que queremos.
La densidad nutricional: ¿regla de oro para toda la vida?

Todas las funciones de nuestro cuerpo dependen de los nutrientes que puede recibir, metabolizar en sustancias químicas y convertir en energía. En lo opuesto, el cuerpo tratará de desechar las sustancias que no tienen ningún componente nutricional, ya que las considera tóxicas.
La alimentación con alto valor nutricional se sustenta en consumir productos naturales o lo menos procesados posible en su estado original más cercano, con una variedad amplia de colores. Por eso la mejor recomendación que puedes seguir es incluir todos los colores del arcoíris en tu alimentación.
Además, puedes obtener una alta densidad nutricional en la variedad de carbohidratos complejos, proteínas y grasas saludables que encontrarás en frutas, vegetales, legumbres, nueces, semillas, cereales completos y proteína animal de alta calidad.