- Lisbet Fernandez-Vina
Victoria Cartagena: Con el Alma Al Aire

Dice Gardel que “veinte años no es nada”. Para Victoria Cartagena es toda una carrera artística que le ha permitido vivir “varias vidas a la vez”. Si su rostro te resulta conocido es porque Victoria le ha dado vida a interesantes personajes a lo largo de su trayectoria artística como es el caso de la intrépida detective del Departamento de Policía de la ciudad de Gotham, Renée Montoya en la serie de Fox Gotham, personaje que luego reapareció en la serie Batwoman, como la coqueta y descarada estudiante Zoe López en The Bedford Diaries de WB, la amorosa pero traicionera mejor amiga Lourdes, en el show de NBC Manifest, y recientemente como la inquisitiva oficial Reyes de la serie Servant de Apple TV, producida por M. Night Shyamalan, entre otros roles significativos.
La talentosa actriz de ascendencia puertorriqueña, reconocida por sus personajes en populares series televisivas como Gotham, Batwoman, Manifest y Servant posó en exclusiva para esta edición
“Creo que el papel que hice en el show Manifest es por el cual soy más reconocida”, nos contó Victoria en su reciente visita a Miami para participar en la sesión fotográfica que acompaña a este reportaje. “Pero el papel que más me ha impactado en mi carrera profesional ha sido el interpretar a Amanda en el drama Almost Family”. La serie no tuvo una larga trayectoria en televisión, ya que solo se filmó una temporada justo antes de la pandemia. Su personaje, Amanda Doherty, es una exitosa y arriesgada abogada lesbiana. “Interpretar a Amanda me sacó de mi zona de confort. Ella es muy atrevida, sexy, irreverente, se viste como quiere y ama con valentía. Amanda no tiene un solo hueso tímido en su cuerpo”, explicó sobre este personaje que cuenta con ciertas características de las cuales la Victoria de la vida real carece. “Cuando me adentraba en el personaje, me vestían y maquillaban como Amanda, era como si yo accediera a una parte de mí que yo no sabía que existía. Me siento muy orgullosa de esa actuación, pero estuve constantemente con el corazón en la boca durante toda de filmación”.

Este mes, la talentosa actriz, nacida en Philadelphia de padres puertorriqueños, protagoniza el filme independiente Come Find Me que se acaba de estrenar en selectos cines de Estados Unidos y ya está disponible en video por demanda. La película cuenta la historia de dos mujeres, madre e hija, que se encuentran en una encrucijada en sus vidas. El filme, que fue escrito y dirigido por Daniel Poliner, se enfoca en la complicada relación de una familia latina, la cual llega a su clímax bajo la presión de los cambios que ambas enfrentan.
La oportunidad de participar en esta película llegó a través de la directora de reparto Julie Schubert quien ha apoyado su carrera por muchos años y a la cual tiene mucho que agradecerle. “Cuando Daniel estaba buscando protagonista, Julie me recomendó y él confió ciegamente en su elección. A su vez yo deposité toda mi confianza en Julie y acepté el rol”. Originalmente, el filme fue grabado concentrándose en la historia de la madre, y cuando se pensaba que la grabación estaba finalizada, el director decidió añadir una segunda parte y contar la historia desde el punto de vista de la hija. “Al año de haber filmado la primera parte, Daniel me contactó con esta nueva idea y como no es todos los días que alguien se te acerca con la propuesta de escribir para ti, no pude dejar pasar por alto esta oportunidad”.
Una de las cosas que más motivó a Victoria del proyecto fue que la trama se centra en la historia de dos mujeres latinas, tema que ella considera es muchas veces ignorado en Hollywood. El talentoso director también les permitió a ambas protagonistas ser parte del proceso creativo, gesto que significó mucho para ella. “Todos quisimos ayudarlo a contar la historia en la mejor manera posible. Fue importante para todos nosotros y pusimos nuestras mejores intenciones en darle vida a su bello mensaje de amor y unidad”, relató emocionada.

Su pasión por la actuación nació desde muy joven, cuando su padre la llevaba a las tiendas de video para alquilar películas y verlas en familia. “Las tres primeras películas que recuerdo alquilar con mi papá fueron West Side Story, Fame y Flashdance. Quedé obsesionada”, confesó con una amplia sonrisa. “Yo no cantaba ni bailaba pero quedé fascinada con Rita Moreno, Irene Cara y Jennifer Beals. Aunque no sabía cómo iba a hacer para ser parte de ese mundo, tenía muy claro que quería estar ahí, anhelaba ser actriz pero como era una niña muy introvertida, nunca lo compartí con nadie”.
Cuando estaba en la escuela secundaria, Victoria participó en un programa de tutoría organizado por la Universidad de Penn State donde conoció a Lucy Morillo, Publisher de nuestra revista, quien se convirtió en su mentora. “Yo tenía 15 o 16 años cuando participé en el programa veraniego que incluía vivir unas semanas en las residencias universitarias para motivarnos a asistir a la universidad”, contó Victoria remontándose en el tiempo. “Originalmente me asignaron otro mentor pero cuando conocí a Lucy llamé a mi mamá y le pedí que hablara con el consejero para que asignaran a Lucy como mentora. Con ella me sentía protegida y no me separé de ella durante todo el tiempo que duró el programa”. Desde entonces ambas mujeres han mantenido una estrecha relación en la que Lucy como “hermana mayor” le ha ofrecido mentoria y guía a través de los años.

De aquella experiencia nació la idea de estudiar para ser maestra y fue así como ingresó en la Universidad de Penn State donde terminó obteniendo una licenciatura en educación en 1998. “No fue hasta que llegué a la universidad que tuve el valor de compartir mis sueños de ser actriz con otras personas”, explicó Victoria con nostalgia. “Fue mi pequeño secreto por mucho tiempo, pero afortunadamente mis amigos, sabiendo cuánto yo amaba la televisión y el cine, me motivaron a seguir mis sueños”. Al finalizar la carrera, Victoria se mudó a Nueva York donde estudió en la Academia Estadounidense Musical y Dramática y en el Centro de Desarrollo de Lark Play antes de ser “descubierta” por un agente de talento. “Yo estaba trabajando en la recepción de un gimnasio y me presentaron a un agente de talento que se interesó en mí, en menos de un mes me consiguió mi primer papel. Cuando ese proyecto se canceló, comencé en la verdadera rutina de ser actriz, que implica audicionar constantemente”. Cuenta la talentosa mujer que pasa gran parte de sus días de audición en audición, aprendiendo líneas y practicando para varios roles. En el proceso continúa perfeccionándose como actriz, hecho que la llena de satisfacción. “En este giro hay muchos ‘No’ antes de que te den el glorioso ‘Sí’. Esto es algo que llevo haciendo por los últimos 19 años de carrera artística y lo cual he perfeccionado”. Conversando sobre la edad, que en ocasiones es considerada un factor limitante en Hollywood, expresó: “en la actuación he obtenido madurez y un crecimiento que llega solamente con los años. Me resultan mucho más interesantes las historias que se cuentan desde la sabiduría de las experiencias de vida, así es que encuentro desacertado que existan factores limitantes”, aseguró convencida y añadió: “Ahora que estoy en mis cuarenta he estado interpretando muchos personajes que son expertos y profesionales, algo que disfruto enormemente. Espero que los papeles sigan llegando y que evolucionen conmigo”.

Este mes, Victoria está celebrando por partida doble, ya que regresa además a la pantalla chica con un papel recurrente en la serie de televisión Servant que se acaba de estrenar también hace unos días en Apple TV. “Esta es la cuarta y última temporada de Servant y aunque no puedo adelantar nada, les cuento que será un cierre de serie épico”, agregó con picardía en la mirada.
En este momento de su carrera, Victoria se siente realizada y agradecida por todo el camino recorrido, pero también llena de esperanzas por todo lo que aún le falta por recorrer. En este 2023 está enfocada en superar sus propios límites y comenzar a arriesgarse más en lo que se refiere a su carrera profesional. Restrospectivamente considera que perdió oportunidades en la industria por no haber creado las relaciones necesarias para posicionarse y aprovechar al máximo las oportunidades. “Si pudiera darle un consejo a mi Yo más joven le diría que intentara abrirse ante la vida, la gente y las relaciones. Ser actriz es un negocio y es importante construir relaciones en el mercado y promoverse uno mismo. No se puede solamente confiar en el talento, eso solo te lleva hasta cierto punto”.

Y es que esta fabulosa actriz, aunque sea difícil de creer, es una persona tímida, lo que puede confirmar todo el que la conoce de cerca. Victoria prefiere escuchar, antes de hablar y observar antes de participar. Ella cuenta que en ocasiones las personas la han juzgado erróneamente cuando ella rechaza invitaciones de sus colegas o simplemente decide no participar en alguna actividad. Nunca se imaginan que lo hace por su peculiar forma de ser, no porque no quiere compartir o disfrutar en grupo. “Existe una falsa idea de que para ser actor hay que ser una persona extrovertida”, añadió.
Aún así ha sabido ganarse el cariño de muchos, y cuenta con un íntimo grupo de amigos que la apoyan incondicionalmente. Una de las personas más importantes en su vida en este momento es su pareja, la escritora y guionista estadounidense Zina Camblin. “Cuando estaba grabando la serie de television Almost Family, conocí a mi pareja actual. Ella fue una de las escritoras en el programa y fue así como nos hicimos amigas, luego comenzamos a salir juntas y el resto es historia. Ha sido una trayectoria de amor muy hermosa”.
En el plano personal Victoria está feliz, aunque cuenta que está atravesado un momento muy particular como madre, ya que sus hijas gemelas están entrando en la adolescencia. “Recen por mí”, contó entre risas. “Ellas están creciendo muy rápido y estoy comenzando a aceptar que ya no son mis bebés. A una le gusta dibujar, los juegos de video y el género anime, y la otra está interesada en el maquillaje, la moda y la buena televisión. Son completamente diferentes en sus gustos, pero amables, consideradas y de gran corazón”. Y es que la manzana nunca cae lejos del árbol. Desde estas páginas le enviamos muchas bendiciones a esta bella mujer que ha pasado a ser por siempre parte de la familia de S Revista.